Finalizado
ya el curso y haciendo balance de él, debo admitir que cuando empezamos las
clases estaba un poco desorientada, pues no sabía de qué trataba la asignatura
y si íba a gustarme o no.
Cuando empezamos a ver la materia y
Daniel nos habló del Homo Sapiens, Homo Hábilis,…, pensé: “¿el nombre de la
asignatura no es Tendencias contemporáneas? Y ¿qué tiene de contemporáneo el
Homo Sapiens?” La verdad, estaba un poco desubicada. Sin embargo, poco a poco
me fui adaptando a las clases y, entonces, descubrí cuáles eran los cuatro
fundamentos de la educación, el informe Delors, los Derechos Humanos (documento
muy interesante que deberíamos tener todos presente en nuestra vida, tanto si
estudiamos pedagogía, educación,…, como si no), la Ilustración, Olavide,
Jovellanos, Rousseau, Pestalozzi, Dewey, Motessori, la Escuela nueva, el
sistema educativo español, etc.
He de reconocer que, a medida que
hemos ido desarrollando la materia, me he interesado aún más por ella, sobre
todo, a partir de la Ilustración. Me han parecido temas muy bonitos y curiosos
que me han dado la oportunidad de repasar algunos aspectos, conocer otros y
profundizar en otros. Por ejemplo, Rousseau y Jovellanos ya los conocía y me ha
gustado profundizar aún más en sus teorías de la educación, he podido repasar y
recodar un poco de de historia de nuestro país con la Ilustración y el sistema
educativo, y he podido conocer y descubrir a Dewey, que me ha sorprendido pero,
sobre todo, a María Montessori (que muchos creen que es un hombre hasta que les
dices el nombre), que me ha encantado.
Para terminar, ahora sí entiendo el
nombre de la asignatura y debo decir que no me ha dejado indiferente. Me ha
hecho trabajar, pensar, reflexionar y he aprendido muchos aspectos y temas
relacionados con la Educación y con el ser humano que antes desconocía. Para
mí, esto es un comienzo para seguir adelante y conocer aún más.
No hay comentarios:
Publicar un comentario